Él se enamoró de sólo una parte de ella; con eso tuvo para perder la cordura. Un segundo de esos que se eternizan en la mente, bastó para que la palabra amor tomará el verdadero significado en su mente: ansiedad por verlos, por mirarlos, por idolatrarlos; por quedar apresado de esa dulce mirada para siempre.
Unos ojos amielados y con hendiduras alargadas fueron su perdición. Además, esa expresividad que trasminaba sentimientos lo atraparon enseguida. A quienes les parezca irrisorio que esto suceda y no encuentren lógica en la forma de enamorarse, es porque aún no les queda claro que lo más ilógico que podemos encontrar en este mundo es precisamente el amor.
De cuando en cuando, las palabras se alinean a capricho de la mente para formar, en algunas ocasiones, relatos e historias reflejos de la realidad; en otras, surgen textos pertenecientes a la irrealidad. Este espacio está para cuando la inspiración se haga presente en cualquier forma: cuento, crónica,relato...
jueves, 5 de abril de 2012
domingo, 1 de enero de 2012
365 días de “no amarte”
Por las comisuras de tus labios suaves se va un año de supuesto olvido. Un beso, sólo uno bastó para tirarle a mi razón esa necia idea de que, amorosamente, ya no eras presente para mí. Para ti fue algo simple, para mí será un volver a empezar.
¿Por qué besar a quién estimas? No te entiendo. No comparto tu idea de cotidianizar un acto noble. Debo añadir que no te comprendo en muchos aspectos, quizá eso provocó la atracción: pretender descifrar tu complejidad.
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